Ya crece vida en tierra arrasada por el incendio en el cerro Comandante Díaz

Plantines de árboles nativos de unos pocos centímetros emergen de la tierra y regalan los primeros brotes para poblar el espacio que fuera afectado por las llamas durante el pasado verano.
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Los frutos de la siembra en la zona reforestada que fuera afectada por el incendio ocurrido en febrero pasado, comenzaron a florecer en el Cerro Comandante Díaz, que por sectores hoy luce pelado como un paréntesis entre la frondosidad del bosque producto de las llamas que entonces y en pleno verano arrasaron con al menos cinco hectáreas.

Las tareas de remediación en el lugar dieron inicio el pasado mes de julio con la plantación de 360 ejemplares de especies nativas, cultivadas en el Vivero Municipal. Aquel primer paso hoy comienza a verse reflejado con el nacimiento de los primeros brotes de los árboles que pretenden rellenar ese espacio vacío producto del siniestro originado por las llamas.

Los trabajos son impulsados de manera conjunta por vecinos del paraje Newen Antug de la Comunidad Mapuche Curruhuinca y personal de Protección Civil (PC).

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El Plan de Remediación, enmarcado en el proyecto de la Ley de Bosques de la Dirección de Bosque Provincial, tiene como objetivo el fortalecimiento de la ladera, acompañado de un monitoreo permanente.

La última actividad del año realizada en el sector consistió además en la construcción de “terrazas” de tronco para generar firmeza en el suelo, evitando posibles desprendimientos.

"Es un Plan muy completo. Dedicarle recursos, financiamiento y prioridad a la remediación de una zona afectada por incendios es realmente muy importante, y es fundamental en este sentido destacar el apoyo de los pobladores, que demuestran diariamente un gran compromiso y predisposición para acompañarnos", señaló Emanuel Tula, integrante del equipo de PC.

Cabe recordar que aquel incendio ocurrió  justamente en el día del Aniversario de San Martín de los Andes. Por sus característica de interfase hubo daños en viviendas que fueron arrasadas por las llamas. Incluso vecinos colaboraron con Bomberos en las calles para intentar detener el avance del fuego que durante algunas horas causó preocupación hasta su extinción definitiva.

Tareas de este tipo se realizaron también durante el año en la ladera afectada por incendio de 2018 del barrio Los Radales. En este caso con la participación e incansable trabajo de la comunidad.