Suena fuerte el regreso del tren Buenos Aires-Bariloche

Después de 26 años analizan reflotar el servicio que fuera privatizado en los 90' . Para eso, habría que reparar los rieles del tramo Bahía Blanca – Carmen de Patagones. El viaje demandaría un día y medio y dos transbordos.
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"Ramal que para, ramal que cierra", dijo el ex presidente Carlos Menem en noviembre de 1989. Dos años después comenzaría el desamantelamiento del sistema ferroviario argentino que puso de rodillas a infinidad de pueblitos y parajes del interior del país, lo que devino en la migración a los grandes conglomerados urbanos, con fines de subsistencia.

Lo que Perón había conseguido el 1 de marzo de 1948 con la nacionalización de los trenes, entonces en manos británicas, fue echado por tierra por otro líder que propaló su obra durante la campaña para luego hacer lo contrario cuatro décadas más tarde con las privatizaciones.

Fue así como lentamente los trenes dejaron de correr por las vías, las estaciones se transformaron en postales de abandono y el camión comenzó a cobrar fuerza como medio de transporte de carga.

En ese contexto, el tren de Bariloche a Buenos Aires supo subsistir hasta 1995 cuando su crujir entre durmientes pereció sin oposición ante el despiadado neoliberalismo ocupado por el "costo" y la "eficiencia" más que por brindar un servicio público estratégico que sirva no sólo a la economía sino para comunicar a las familias a uno y otro lado del anden.

Entonces sólo el Tren Patagónico -tramo Viedma/Bariloche- supo oponer resistencia y desafiar al olvido. A cargo de la Provincia de Río Negro actualmente continúa con orgullo rodando y de yapa permite ahora soñar con el regreso del servicio tras 25 años de ostracismo.

En línea con esto, trascendió que el titular del Tren Patagónico, Nestor Bruno, mantuvo una reunión con el presidente de Trenes Argentinos, Operadora Ferroviaria Sociedad del Estado (SOFSE), Martín Marinucci, para abordar este y otros temas.

Allí vieron con buenos ojos la posibilidad de rehabilitar el tramo. Para eso, habría que reparar unos 70 kilómetros de rieles, donde el tren no supera los  30 kilómetros por hora. La idea es optimizar el funcionamiento para que la formación pueda alcanzar al menos los 60 km/h.

Ya en 2013 se había realizado una prueba y en el resto de la excusión la formación pudo circular a una velocidad optima de 100 km/h.

Los pasajeros que se inclinen por el tren deberán recorrer los 640 kilómetros que separan Constitución de Bahía Blanca. Desde allí deberán subir a otra formación para arribar a Carmes de Patagones, lugar en el que harán el segundo y último transbordo para tomar el Tren Patagónico que une Viedma con Bariloche a través de 827 kilómetros.

“Están pensando en volver a tener trenes de pasajeros en el tramo Bahía Blanca– Patagones. Ahí hay un sector de vías que habría que mejorar para que las formaciones tengan una velocidad comercial aceptable”, expresó el intendente bahiense Héctor Gay, según consigna el Diario El Cordillerano.

Y agregó:  “La idea es que vuelva el tren de Plaza Constitución a Bariloche, aunque sea con trasbordo Buenos Aires–Bahía por un lado, Bahía-Patagones por el otro y en Viedma entroncar con el Tren Patagónico”.

Entre las ventajas de este medio de transporte, se destaca  su comodidad y el bajo costo del valor del pasaje. ¿Su principal enemigo?, el tiempo que demandaría el viaje: alrededor de un día y medio.